El postoperatorio no suele ser doloroso. Las molestias que generalmente aparecen suelen controlarse bien con analgésicos habituales. El vendaje y los tubos de drenaje normalmente se retiran en 24 a 48 horas.
Los primeros puntos se retiran alrededor de la semana y los puntos del cuero cabelludo y/o las grapas un poco más tarde. Es normal que sienta la piel de la cara “acorchada”. Esta sensación es transitoria y desaparece en unas cuantas semanas. Considera como normal que la cara estará inflamada y presente morados. Este aspecto sólo durará entre 10 y 15 días, aproximadamente.
Es aconsejable que hagas reposo relativo durante las dos primeras semanas y que evites los ejercicios o actividades violentas durante, al menos, las dos semanas siguientes a la operación. La piel de la cara necesitará cuidados específicos y no deberás exponerla al sol o a rayos UVA durante al menos tres meses.
Al principio, puedes sentirte preocupada/o por el aspecto de la cara,¡. Piensa que la mayoría de las personas regresan a una vida normal, incluyendo el trabajo, a partir de las dos semanas, dependiendo de cada caso. En este periodo la inflamación se normaliza y desaparecen los morados. Las cicatrices tardan algunas semanas más en disimularse, pero finalmente se hacen prácticamente imperceptibles.
A partir de la tercera semana, tu aspecto será mucho mejor. Si tienes que volver a trabajar, puedes aplicarse maquillaje para camuflar los posibles morados que puedan persistir.
Las perspectivas del lifting son buenas, especialmente si eres consciente de que los resultados no se aprecian de forma inmediata. Después de la inflamación y los morados, puede ser que el cabello situado en la sien sea más fino y la piel esté más seca y enrojecida durante unos meses.